De la Sete de Setembro al Dois de Julho:

tierra, vida y memoria caboclas en el centro de Salvador

Resumen

A principios del siglo XX, los símbolos del patriotismo republicano fueron elevados a los monumentos, reformando-estampando los centros urbanos, como lo hizo la Avenida Sete de Setembro en Salvador, en su apertura y toponimia. Pero, ¿qué intentaron omitir tales embestidas del poder gobernante? La llegada de la modernidad a las ciudades brasileñas empujó a la población negra a los márgenes de los espacios [monumentalizados-espectacularizados] ahora destinados a las élites. Sin embargo, tales sujetos se vieron impulsados sea a construir sus propios quilombos en los márgenes de tales monumentos, o a profanarlos con sus propios rituales diarios. Ambos movimientos encontraron en las ruinas -físicas y simbólicas- las condiciones de posibilidad para [re]producir estos modos de existencia en la ciudad. Para comprender cómo estos procesos lidian con los actuales embates de los poderes hegemónicos (públicos y privados), invocamos a Dois de Julho, un barrio que toca la Avenida Sete y honra, en su toponimia, la fecha conmemorativa de la independencia de Brasil en Bahía. Buscamos, en el territorio, la presencia cabocla de aquellas personas que trabajaron en la primera línea de la guerra de independencia, pero sobretodo de quienes luchan día a día por el derecho a permanecer en el lugar con el que constituían vida y sustento.